Hace un tiempo que EA quiso lavar un poco la imagen de compañía grande, que sólo hacía triples A para sacar dinero, y empezó a trabajar en las obras más artesanales y puras del sector: los juegos indie. De ahí surgió la política de acoger obras más pequeñas, que presentaran propuestas diferentes, y un tiempo después nos llegó de su mano uno de los juegos más bonitos de los últimos años, Unravel.
Pues bien, pasado un tiempo prudencial (ahora veremos si suficiente), en EA anunciaron de forma inesperada, durante el E3 2018, que lanzaban «Unravel Two», y que estaba disponible en ese mismo momento en las tiendas de PlayStation 4, Xbox One y PC (Origin).
En ese mismo momento pude bajarlo y probarlo, dejándome sensaciones encontradas. Ahora, Electronic Arts ha tenido el detalle de cedernos una copia del juego para poder traer el análisis a Tribeca Review y voy a contar qué me ha parecido esta segunda parte, pero antes confesando que la primera me encantó y que llegaba a esta secuela con muchas esperanzas y con el listón bien alto.
En la primera entrega, la trama estaba algo más clara, ya que nos daban más pistas sobre lo que ocurría (pero no entraré ahí por si alguien no lo ha jugado todavía), pero en esta segunda parte vemos como el argumento se difumina y, en ningún momento, recibiremos pistas sobre lo que está pasando en realidad.
Como ya vimos en su predecesor, la historia se «cuenta» a través de recuerdos, representados por personajes nebulosos que aparecen al fondo de las escenas mientras jugamos y los cuales van haciendo algo mientras nosotros intentamos superar los niveles. Incluso en algunas ocasiones nuestra intervención es necesaria para salvar a los dos pequeños protagonistas.
El argumento es tan críptico que, incluso siendo los protagonistas de los recuerdos dos pequeñas figuras no podemos saber ni su sexo o edad, pero que yo intuyo que se trata de dos hermanos (o hermano y hermana), quienes tiene un problema de violencia doméstica, por lo que el viaje que hacemos trata de una huida del hogar paterno.
Algo que hace muy bien el juego es dejar volar nuestra imaginación. Las escenas son genéricas y poco claras, por lo que cada jugador seguramente interprete a su manera la historia, basándose en su propia experiencia o en situaciones que haya vivido en su adolescencia. De esta forma «Unravel Two» consigue conectar con el jugador, y es lo que lo hace tan especial y emotivo.
Una cosa que me llamó la atención del juego fue su rapidez y agilidad. Y como no acababa de entender porque me daba esta sensación me puse a repasar el primer título y, entonces, me di cuenta: es mucho más plataformero, sacrificando los puzles. Por ello la acción es más rápida y si somos habilidosos la velocidad se puede disparar. Tan sólo en un par de ocasiones me paré a rascarme la cabeza porque no sabía solucionar el puzle.
Supongo que esta inclinación clara hacia el plataformeo se debe a que este juego está pensado para ser jugado por dos jugadores, y el meter muchas fases de cooperación, saltos y lanzamientos de yarnys le da la vida y el atractivo que buscaban.
Aquí hay que incidir, ya que la primera parte era para un sólo jugador y en esta secuela el multijugador es clave. El juego goza de un cooperativo local, nada de online, para que juguemos con nuestra hermana o amigo de turno, codo con codo, y nos ayudemos mutuamente a superar todos los desafíos. Yo lo he probado así y el juego es divertidísimo. Pero, por fortuna, también piensa en la gente más solitaria, que no tiene un par de manos cerca (a parte de las suyas) para jugar, y aquí toca explicarse.
Mi mayor miedo en «Unravel Two» era que no se pudiera disfrutar del juego si se jugaba sólo, ya fuese porque no estaba pensado para ello o porque no hubiesen sabido imprimir el ritmo y la velocidad que se tiene cuando jugamos en cooperativo. Pero, por fortuna, este miedo era infundado y me di cuenta al poco de jugar.
La opción de fusionar a los dos yarnys en uno para los momentos en los que no se necesita la cooperación entre ambos resuelve todo el problema de la agilidad y el ritmo, por lo que el juego no sufre esa falta de cooperación. Tan sólo en las partes en las que hay que controlar a los dos personajes para superar algún nivel hemos notado algo más pesado el control resintiéndose la experiencia.
Está claro que, al no llamarse «Unravel 2», sino «Unravel Two», la declaración de intenciones de EA y Coldwood era clara: queremos que sean dos las personas que jueguen, no una. Pero no son nuevos en esto, y han sabido transformar esa experiencia en un must y no en un have.
Una cosa en la que mejora esta segunda entrega a la primera en el apartado visual. Es aún más bonito, y mira que era difícil. Los paisajes parecen a veces fotorrealistas, la iluminación y los colores están cuidados al milímetro y muchas veces me quedé quieto observado un determinado plano por su preciosidad.
El juego, que es un scroll lateral continuo (como los Mario en dos dimensiones por si alguien no sabe de qué hablo), se ve mejorado gracias a que su fondo y su ambientación es perfecta. Pocas veces me he maravillado tanto con un apartado artístico y ese juego de enfoque y desenfoque es genial. Es de diez en este aspecto.
En mi caso lo he jugado en PC, a una resolución de 2560 x 1440 p y en máxima calidad gráfica, y el juego gana en realismo (además de que el juego es muy poco exigente y casi cualquier ordenador moderno lo puede mover a tope). En Xbox One X, en la que funciona a 4K, el juego se ve igual de bonito, pero me temo que no utiliza la calidad gráfica en Ultra, y eso se percibe en que la iluminación no es tan buena. Quitando eso es disfrutable en ambas plataformas, por supuesto. Y a 60 FPS, que le sienta muy bien para la sensación de velocidad.
Si os gustan los juegos indies, o los plataformas, o los títulos con puzles o, simplemente, te gustan los buenos juegos, «Unravel Two» es una apuesta segura para tenerlo en vuestra biblioteca. Es bonito, divertido, memorable y rejugable (tiene un montón de desafíos muy difíciles repartidos por el Faro, la zona central del juego que nos da acceso a los siete capítulos), por lo que es candidato a ser vuestro juego del verano, con el que jugar con tu familiar más querido y compartir una bonita historia.
Como buen indie su precio es reducido, y por tan sólo 19,95 € os podéis hacer con él. Además de que es carne de Origin Acces y de rebajas, por lo que en unos meses (si queréis esperaros) os costará muy poco dinero, aunque os aseguro que los 20 euros que cuesta, los vale.
Sin duda «Unravel Two» es uno de los indies del año, y habrá que ver respecto a «Celeste» y a como sale el nuevo «Ori and the Will of the Wisps», para asegurar quién se llevará el pato al agua en los The Game Awards.
Para analizar “Unravel Two” hemos utilizado: