Análisis de Dead Island 2: gamberros vs zombies

9 mayo, 2023
Josué Gómez

Deep Silver nos trae Dead Island 2. Esta vez la invasión se produce en la costa oeste de EE. UU y no va a ser fácil que nos evacuen

Tras el éxito combinado de Dead Island y Dead Island: Riptide en Deep Silver decidieron que sería buena idea hacer una segunda parte y así lo anunciaron en el E3 de 2014, cuando Dead Island 2 ya llevaba dos años en manos del estudio alemán Yager Development. En 2016 el proyecto cayó en manos de Sumo Digital y al final en 2019 fue a parar a Dambuster Studios que es quien finalmente lo termina.

La mala noticia es que este retraso de nueve o diez años se nota. Sobre todo en un set de mecánicas que está desfasado, un historia muy previsible y un motor de juego que cumple pero no deslumbra. Ni tan siquiera queda claro a qué tipo de juego estamos jugando.

Podríamos decir que Dead Island 2 es un juego que combina terror y rol de acción, pero también sería mejor decir que es un videojuego de disparos y lucha en primera persona.

Sí, está plagado de infectados que intentarán acabar con nosotros y sí, la atmósfera podría ser la de un juego de terror. Pero nuestro protagonista tiene un arsenal de armas y movimientos de combate que lo hacen una máquina de triturar carne en mal estado.

El entorno está repleto de objetos que bien usados pueden ser nuestros aliados en la lucha. Y el enfoque no es huir o esconderse, sino avanzar arrasando con todo lo que se mueva. Como dicen los ingleses: Que descansen en pedazos.

Dead ¿Island? Bienvenido a Los Diablos

Al contrario que en la primera parte ya no estamos en una isla, sino que aparecemos en lo que vendría a ser Los Ángeles (Hell-A o Los Diablos en el juego). También pasearemos por la zona de San Francisco.

Podemos considerar Dead Island 2 como un mundo abierto pero distribuido en barrios. Para pasar de un barrio a otro hay diferentes caminos y una breve pantalla de carga, pero siempre podemos volver ir y volver a nuestro gusto. En cada uno de esos barrios podremos explorar con libertad o ir directamente a por las misiones principales.

Dead Island 2 comienza con un video que nos presenta a nuestros seis posibles protagonistas llegando por sus medios al avión de evacuación. Ya en el avión tendremos que elegir a quien queremos llevar y cada uno tiene sus propias características y habilidades para comenzar. Por desgracia esta selección influye poco o nada en el juego.

Las habilidades iniciales tienen un impacto bien pequeño y las siguientes las puede aprender todo el grupo. Por ejemplo, algunos personajes como defensa esquivan los ataques enemigos y otros los bloquean. La habilidad contraria a la que tengamos se aprende más adelante en el juego lo que hace que al final todos los personajes puedan tener una build muy similar.

Dead Island 2 ingame Si queremos probar personajes distintos, tened en cuenta no se pueden cambiar una vez empezada la partida. Así que nos tocará empezar una partida nueva en otro slot. Podemos elegir qué grupo de habilidades con cada matazombies y así ir de apoyo, potenciar nuestro daño o nuestras defensas. Porque, por si no lo sabías, el juego se puede jugar en cooperativo con hasta dos amigos más y ahí las sinergias pueden ser muy importantes.

Una vez pasado el sencillo tutorial nos vamos a la primera zona y, por supuesto, a buscar nuestra primera casa refugio. En esta casa y en otras similares tendremos un sitio donde descansar, banco de trabajo para reparar y mejorar esas armas, NPCs que nos ayudaran a seguir la historia y nos darán misiones secundarias y algún que otro secreto. Cuando estéis preparados coged vuestras herramientas y salid al mundo a reventar cadáveres putrefactos.

La manera de jugar es bien sencilla, ir al punto que nos marcan, matando todo lo que haya en nuestro camino, y descubrir, rescatar, recoger o eliminar al objetivo. Según subamos de nivel el mundo sube con nosotros y también las recompensas.

Las habilidades del personaje, representadas como cartas de una baraja, se van consiguiendo al hacer misiones, conseguir retos o incluso descubriendo alguna por el mapeado de Dead Island 2. De igual manera obtendremos los potenciadores para las armas.

Una vez acabada la misión que estemos haciendo o el paseo que nos estemos dando por Dead Island 2 tocará volver al banco de trabajo, reparar, mejorar, rellenar el inventario y decidir qué hacemos después.

Muchos zombis… eh, muchos zombis (entone la frase como si fuese Bad Bunny)

Dead Island volador Dead Island 2 es un juego gamberro. Nada de temer al lobo feroz, eres el cuarto cerdito, el que tenía una casa hecha con pieles de lobos, y se nota. Cada enemigo que te surja es una oportunidad de ser creativo en tu forma de eliminarlo.

Las armas cortantes no son iguales que las contundentes. Las grandes son distintas de las pequeñas. Y tu cuerpo es una atlética máquina de matar. Y el entorno te brinda muchas herramientas para potenciar la estética y efectividad de tu daño. Y alguna trampa también, que no todo van a ser buenas noticias.

Para avanzar bien en el juego necesitamos experiencia y nada mejor que obtenerla a base de cosechar infectados maduros. El entorno y el daño elemental nos da la capacidad de crear combos que además de ser preciosos harán subir más rápido el contador de experiencia.

Nuestro único límite es la durabilidad de las armas, pero como podemos llevar hasta ocho equipadas y otras ocho en reserva es fácil hacer masacres antes de pasar por un banco de trabajo a reparar.

No os despistéis porque el enemigo aparece y reaparece por doquier. Donde penséis que tenéis una habitación limpia y segura os podréis encontrar con uno o varios infectados que nos pueden aguar la fiesta en caso de tener que hacer un repliegue táctico.

Los materiales necesarios para construir, los botiquines y consumibles, así como el dinero, también vuelve a aparecer pero ni mucho menos tan rápido como esos odiosos muertos mal enterrados.

Conclusiones: el juego llega tarde o no llega

Dead Island 2 ingame Aún no lo tengo claro del todo. Dead Island 2 hace bien todo lo que tiene que hacer un juego de 2015, que es cuando tendría que haber salido. Un año en el que pudimos disfrutar de Resident Evil: Revelations 2, SOMA, Mad Max, Just Cause 3 y Wolfenstein: The Old Blood entre otros muchos. Y en aquella época Dead Island 2 hubiera podido competir por el top 50, incluso el top 20. Pero ahora sus mecánicas están desfasadas y se nota que con tanto cambio de estudio al final alguien decidió sacar un producto correcto pero sin más pretensiones

En el combate usaremos la patada mucho y nos divertirá hasta que nos cansemos de verla. Las armas cuerpo a cuerpo son distintas, pero las animaciones son muy similares. El sistema monetario es horrendo, llegando al punto de que nos veremos cada dos por tres sin dinero. Sobre todo porque reparar las armas cuesta dinero y no materiales. Pero también cuesta dinero mejorar esas armas. Y ponerles efectos. Y no hablemos de las armas a distancia y de la escasa cantidad de munición que puedes llevar encima.

El mundo de Dead Island 2 es abierto, pero da pereza tener que estar viendo una pantalla de carga cada vez que quieres cruzar una zona. Y las misiones son tan absurdas como «Ve a buscar una botella de whisky a mi antigua casa que tengo antojo». Así es imposible cogerle cariño a esos personajes. De igual manera todos los NPCs parecen estar viviendo en un mundo en el que el apocalipsis zombi no es más que una molestia cualquiera mientras que tú intentas conseguir que os evacuen a un lugar seguro.

El número de enemigos no es muy variado y se parece en extremo a todo lo que ya se ha visto, el que se arrastra, el caminante, corredor, pesado, el que escupe, la gritona, y alguno más que no os quiero chafar la sorpresa, pero que seguro que ya habéis visto en otros sitios. Al menos tienen una cierta variedad en cuanto a su daño y/o resistencia elemental. Y hay que dar un aplauso porque en el estudio se han preocupado de que cada parte del mapeado incluya infectados vestidos como corresponde. Los de playa van con bañador, los del barrio con ropa normal, los que estaban en una boda van con trajes de fiesta… Esa variedad se agradece.

Dead Island 2 en sí está bien, el motor gráfico cumple y no es ultramoderno pero sí muy fluido. En mi equipo la media era de 100 fps con todo en Ultra y una resolución Full HD. Los sonidos también son buenos, escuchar como intentan venirte por la espalda y poder evitarlo es un gustazo. La música acompaña bastante aunque recomiendo bajarla un poco para poder escuchar las posibles emboscadas. En 24 horas jugadas solo recuerdo un error del juego en forma de cierre del mismo.

Si os gusta mucho lo vais a disfrutar, pero si solo os gusta al final se os hará repetitivo y aburrido. No es largo y tiene momentos graciosos y también épicos. Si tenéis la oportunidad, dadle un tiento porque lo mismo os gusta.