Hace nada os traíamos el análisis de la cámara Razer Kiyo, un producto de la compañía americana para hacer a los streamers más calidad a sus directos, así que hoy toca el otro equipo pensado por Razer para acompañar a la webcam, que no es otro que el micrófono Seiren X.
Este micrófono pretende conseguir una calidad cercana a lo profesional sin llegar a costar un riñón, y para ello en Razer se han centrado en ciertos aspectos clave: El tamaño, el peso y la portabilidad. Estas son sus señas de identidad, y son algo muy valioso ya que sus contrincantes son muchos y muy buenos.
Pero, como siempre, comenzamos el análisis con las características técnicas del Razer Seiren X:
He estado todo un mes utilizándolo en mi día a día, en Discord y en los directos en Twitch, así que voy con mis impresiones del que es, sin duda, uno de los micrófonos a tener en cuenta a día de hoy.
El Razer Seiren X está formado, principalmente, por un micrófono de condensación de 25 mm de diámetro, lo que sobre el papel es una buena cápsula que debería realizar las tareas de grabación con una gran calidad de audio.
Pues bien, tanto en Discord como en los directos, el sonido que da el Seiren X es muy bueno, siendo sobre todo rico en matices y detalles, debido al tipo de micrófono de condensación que lleva. Además, el perfil de grabación no es cardioide, sino supercardioide, por lo que incide más en la voz y amortigua mejor el ruido ambiental.
Si bien es cierto que hemos notado en nuestras grabaciones un sonido más limpio que con otros micrófonos de condensación, el eco y el ruido de fondo seguían estando presente, pese a tener la sala bastante acondicionada para grabar. Esto, por desgracia, no es culpa de Razer, sino de este tipo de micrófonos, que si bien son geniales en entornos muy controlados (con materiales de absorción de ruido y demás) cuando los llevas a la vida real muestran sus costuras.
Siendo sinceros, sonábamos mejor que casi todos los del servidor de Discord, no hay duda, pero comparados con el micrófono Røde que utilizo a diario, la diferencia es demasiado grande. Tanto como lo que hay con un producto enfocado al mundo profesional y otro dirigido a una audiencia más mainstream.
Eso sí, el sonido es lo suficientemente bueno y claro como para poder utilizarlo a diario, sin preocuparte por si tu público en Twitch o Mixer te escuchan bien, porque el sonido es bueno, sobre todo si tienes poco eco en la habitación.
Si bien he dejado claro que el sonido es bueno (suficiente para el 90% de los streamers), hay elementos en el Seiren X que lo convierten en un micrófono realmente recomendable para según qué tipo de usuarios, ya que su construcción tiene un objetivo claro: la portabilidad.
El micrófono pesa muy poco y va divido en dos piezas muy fáciles de montar, por lo que transportarlo en cualquier tipo de maletín junto al portátil es algo realmente sencillo, mucho más que los Blue Yeti y compañía. En este aspecto se nota que Razer quería crear algo que pudiéramos llevar con nosotros si somos viajeros.
El cuerpo penas sobre pasa los 150 gramos de peso, si bien la base -que es metálica y en su parte de abajo tiene un material que absorbe los impacto- le otorga estabilidad gracias a su peso y a su forma, por lo que, aunque es ligero una vez que se instala y se coloca en la mesa, el micrófono tiene una presencia y una estabilidad muy buenas. Además, el poder rotar el cuerpo 360º para acomodarlo a nuestro gusto hace que consigamos que, en muchas situaciones, capte mejor nuestra voz dependiendo de donde esté el micrófono.
A nivel de movimiento y de accesorios, el Seiren X tiene una entrada jack de 3.5 mm que nos permite conectar unos auriculares y un botón de mute para silenciar el micrófono (muy útil en algunas circunstancias). Por mi parte he echado en falta un regulador de la ganancia, para poder toquetear este valor sin tener que tirar de software.
A día de hoy elegir equipos para hacer directos es difícil, y el motivo es la sobre oferta, que puede despistar a cualquiera que no esté demasiado puesto. Por eso mismo quiero dejar claro que el Razer Siren X es un micrófono que da calidad y portabilidad para aquellos streamers que quieran algo no profesional y que sea muy fácil de transportar.
El sonido es bueno (si tenemos una habitación bien aislada) y el micrófono no ocupa mucho en la mesa, además de ser muy bonito (algo que queda genial en los directos), pero es cierto que en cuanto a calidad de grabación está lejos de modelos de la competencia como puede ser el Yeti Blue (el cual también tiene sus defectos, claro).
Por unos 100 euros, y vendido junto a la muy buena webcam Razer Kiyo en un combo para streamers, el Seiren X puede ser el micrófono de aquellos jugadores que estén pensando en dar el salto a Twitch y Mixer y quieran dar calidad a sus directos sin dejarse un pastizal por el camino.