Si por algo se caracteriza la compañía norteamericana Razer es por hacer periféricos de calidad y de tener un enorme catálogo, equipos que intentan ceñirse a todas las necesidades de los usuarios. Aquí hemos analizado una gran variedad de auriculares, teclados y ratones, y hoy os traemos el análisis de un periférico especial, el Blackwidow Tournament Edition Chroma V2.
¿Y por qué decimos que es especial? Pues porque no es un teclado para todo el mundo, ya que está construido para satisfacer unas necesidades concretas. Pero, antes de entrar en materia, vamos a poner cuales son sus características técnicas:
Para comenzar el análisis toca decir que hemos utilizado durante todo un mes el Blackwidow Tournament Edition Chroma V2, tiempo en el que hemos trabajado y jugado a partes iguales para comprobar que tal se desenvolvía en dichas tareas.
Como primer punto decir que la unidad que nos mandaron para analizar tenía los interruptores mecánicos amarillos de Razer, que son los lineales y silenciosos. Esto es que no poseen el típico click de los ruidosos, y que la presión de la tecla es constante, sin cambios de dureza.
Para nosotros, que pasamos el día escribiendo, nos ha parecido que los switches amarillos son geniales para aquellos usuarios que pasan el día en oficinas o zonas de trabajo con gente cerca, ya que son mucho más discretos que los demás mecánicos. El único ruido que consigues sacar de estos teclados viene de la fuerza con la que presionas las teclas. Por lo que, si quieres, puedes ser totalmente silencioso.
Es cierto que tuvimos que adaptarnos, ya que veníamos de utilizar modelos ruidosos y con el característico click, que consigue darte el feedback de cuando has pulsado la tecla, y las primeras horas de utilizar el Blackwidow Tournament Edition Chroma V2 no parábamos de equivocarnos al presionar más de una tecla a la vez.
Eso sí, una vez que te haces a él, incluso hemos ganado velocidad al escribir ya que no es necesario pulsar la tecla hasta el final, si no que tan sólo con presionarla un poco ya conseguimos pulsar, y eso te hace ganar tiempo.
Una vez aclarado el tipo de interruptores mecánicos que posee el equipo, toca hablar de las características que lo hacen tan especial dentro del muy poblado sector de los teclados. Y es que el Blackwidow Tournament Edition Chroma V2 está pensado para gente que se mueve mucho.
Los motivos que nos llevan a decir esto son varios. Lo primero, que es muy fácil de desmontar y guardar, gracias a que el cable USB que conecta el teclado al ordenador se puede desenchufar, consiguiendo así poder empaquetar el teclado por un lado y el cable por otro. Esto evita las roturas típicas que suelen tener los conectores fijos y rígidos que salen de los teclados.
Otra de las características que tiene es que no posee teclado numérico, por lo que su ancho se ve reducido considerablemente, tanto que es fácil meterlo en un maletín estándar de portátil. Esto, para los que suelen cubrir eventos, ir a conferencias, o competir en eSports por todo el mundo, es realmente cómodo y práctico, ya que pueden transportar el portátil, el teclado y el ratón en un maletín normal, y sin miedo a que alguna de las piezas fijas -como las salidas de los USB- se rompan.
Y la última característica es su peso, el cual no llega al kilo -950 gramos-, cuando sus hermanos mayores sobrepasan a veces los dos kilos, y esos pesos tan altos colgados al hombro en un maletín se acaba volviendo incómodo (amén de las lesiones y tendinitis).
Pero, ¿entonces este teclado es tan sólo para aquellos usuarios que viajan mucho? Sí y no. El teclado cubre unas necesidades muy valiosas para los que más se mueven con el equipo informático encima, pero su buena construcción y su comodidad hace que también sea un teclado para oficinistas o gamers caseros.
Por ejemplo, nuestra experiencia con el Blackwidow Tournament Edition Chroma V2 en terminos de gaming es muy buena. Si bien es cierto que tienes que acostumbrarte a no tener el feedback del click, una vez que te haces a él la experiencia de juego es excepcional (y mucho menos ruidosa, por fortuna para los vecinos).
Pero no todo es bueno, ya que si lo vais a utilizar para trabajos de mucha numeración con muchas hojas de cálculo y demás tareas del estilo, este no es vuestro teclado, ya que la falta de bloque numérico le quita que podamos estar metiendo números con comodidad y rapidez (nosotros ni después de un mes nos hemos acostumbrado a meter los números con la fila de arriba).
Por último, toca hablar de su maravilloso reposamuñecas, el cual se ajusta mediante un imán al teclado y hace que escribir durante horas sea mucho más cómodo y descansado para nuestras muñecas, y su facilidad para quitarlo y ponerlo es un punto a favor para Razer ya que, si bien para escribir es cómodo, para jugar no lo recomendamos y deshacerse de él os llevará un segundo.
Y si sois amantes de la iluminación RGB, el Blackwidow Tournament Edition Chroma V2 tiene tecnología Chroma con la que poder personalizar el teclado con hasta 16,6 millones de colores distintos con el programa Razer Synapse -nuestro preferido es el modo llama, parece una hoguera de verdad-.
Si sois muy viajeros y soléis mover vuestro equipo varias veces al mes, por obligación u ocio, este teclado es realmente genial porque es de los pocos del mercado cómodos de transportar y, a la vez, muy bueno en cuanto construcción.
Los switches mecánicos silenciosos, la esperanza de vida de 80 millones de pulsaciones, lo compacto que es y su poco peso junto al reposamuñecas, hacen del Blackwidow Tournament Edition Chroma V2 un teclado que puede durarnos muchos años por mucho trote y viaje que le metamos, la sensación de robustez es continua.
Al equipo tan sólo le echamos en falta las teclas multimedia dedicadas y el teclado numérico, pero su ausencia está justificada por la misma concepción del producto, así que no son fallos de diseño, sino la respuesta a un concepto.
Por 130 euros es un teclado de gama alta, sin duda, y estamos seguros de que los usuarios que se hagan con él van a estar encantados con el periférico durante muchos años.